Los Angeles Lakers han arrancado la temporada con derrota en la cancha de los vigentes campeones de la NBA, los Golden State Warriors, en un encuentro en el que quedaron patentes algunas de las carencias estructurales que presenta la plantilla dirigida por Darvin Ham.
A pesar de que su Big Three, compuesto por LeBron James, Anthony Davis y Russell Westbrook, se combinó para un total de 77 puntos, el acierto en triples del tridente se redujo a cuatro aciertos en 16 intentos. No priorizar el tiro exterior en la agencia libre ha sido motivo de diversas críticas, las cuales han quedado ratificadas en este primer compromiso de regular season, en el que los Lakers exhibieron un acierto en triples del 25%.
La máxima estrella del equipo, LeBron, no dudó en reconocer tras el duelo la falta de tiro exterior que mostró el equipo. «Creo que hemos tenido buenas situaciones de tiro, pero también podría ser que los equipos nos han permitido esos tiros», afirmó el cuatro veces MVP. «Para ser completamente honesto, no somos un equipo construido sobre un gran tiro. No estamos aquí sentados con un grupo de tiradores que han superado el 40% en triples en sus carreras.»
Partiendo desde la segunda unidad, Kendrick Nunn lideró a los Lakers en acierto exterior, con tres dianas en seis intentos para un total de 13 puntos. Evidentemente, no es justo sacar conclusiones del primer encuentro de la temporada, pero estas carencias no suponen un nuevo desafío sino que han sido arrastradas desde el curso pasado: la franquicia angelina ocupó la 18ª posición en triples anotados (12,0) y la 22ª en porcentaje de acierto (34,7%) durante la temporada 2021-22.