Anoche los Brooklyn Nets cosecharon su tercera derrota en cuatro partidos. Más allá de un rendimiento colectivo pírrico, el encuentro frente a los Bucks volvió a dejar conclusiones tibias con respecto a Ben Simmons. El australiano está lejos de ser el atosigador defensivo que una vez fue y a Nash le cuesta horrores encontrarle un rol en ataque.
Por momentos sí logró ventilar el juego y alimentar contras a través del pase (acabó con 9 asistencias) pero su contribución fue tremendamente irregular y se quedó nuevamente en 4 puntos ejecutando tan solo cuatro tiros de campo.
A pesar de todo, Simmons está siendo la comidilla del entorno mediático de los Nets, y Kyrie Irving insiste con vehemencia en darle un voto de confianza. «Lleva sin jugar dos años. Dale una p*** oportunidad».
En un momento determinado, el propio Irving instó a voz viva a tirar a su compañero ante una buena posición interior. Simmons acabó doblando el balón hacia Durant sumando una asistencia.
Pero a largo plazo, para el equipo es negativo que no lance ese tipo de tiros. Desde el training camp el cuerpo técnico y sus compañeros han sugerido que, cuanto más agresivo sea Simmons, más oportunidades tendrá el resto para anotar. Aún así, Irving pide paciencia. «Nosotros solo vamos a tratar de darle recomendaciones positivas» zanjaba el base.
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