“En agosto del 2020 recibimos un sistema eléctrico sin reservas por lo que si una planta salía de operación para mantenimiento rutinario o por avería entonces se producía un déficit de generación” explicó el ministro en una rueda de prensa en el Ministerio de Energía y Minas.
Agregó que el parque de generación recibido en agosto del 2020 era claramente deficitario puesto que si se abastecía la demanda máxima de energía la reserva que quedaba era menos del 5%, es decir, una capacidad tan exigua que cualquier salida por reparación o mantenimiento de una planta en período de verano se traduciría sin dudas en apagones por déficit de capacidad instalada disponible.
“Esa situación es una clara amenaza para el bienestar de la población y para la recuperación y crecimiento de la economía”, destacó.
El funcionario argumentó que esa situación había sido señalada en el año 2018 por un estudio encargado por la propia CDEEE a la firma argentina Mercados Energéticos, en el que se demuestra la necesidad de instalar una central generadora de 600 MW basada en gas natural en el 2021 y otra también de 600 MW en el 2023. Además, el estudio indicaba que anualmente el país debía instalar 300 MW de energías renovables dividido en 150 MW solar y 150 MW eólica.
“Durante el periodo 2010-2020, se debió instalara unos 1.500 MW nuevos para cumplir con el aumento de la demanda. En ese periodo solo se instaló la Central termoeléctrica Punta Catalina de 720 MW, por lo que hay un déficit de unos 800 MW”, subrayó Almonte.
Indicó que esa falta de reserva de generación ha sido la causa efectiva de los recientes apagones provocados por la salida de la generadora AES Andrés para fines de reparación y de Punta Catalina I para mantenimiento.
Acciones del actual Gobierno
Antonio Almonte sostuvo que para palear esa situación, el presidente Luis Abinader, a pocos meses de llegar al poder, ordenó la licitación LPI-EDES-01-2021, lanzada en febrero del 2021 para construir dos plantas de 400 MW cada una y una terminal para descarga y almacenamiento de gas natural en la costa de Manzanillo, Montecristi. El término de la licitación ocurrirá en los próximos días con la adjudicación de las ofertas ganadoras.
Además, en enero del presente año se lanzó otra licitación de medio término también de 800 MW (LPI-EDES-003-2022) cuyo final y adjudicación está prevista para antes de septiembre del 2022.
Dijo que la ampliación alcanzará cerca de 2000 mil megavatios para garantizar generación de reserva suficiente para suplir el 100% de la demanda ante la salida de cualquier planta
“En resumen, este gobierno está haciendo algo histórico en materia de generación eléctrica en el país, que es dotar a la nación de cerca de 2 mil nuevos megavatios de potencia que se instalarán entre 2022 y 2026”, expresó el funcionario.
