Los diez equipos que no han logrado clasificarse para el torneo ‘play-in’ ya han dado comienzo al trabajo de oficina de cara a posicionarse para la temporada baja, planificar el verano y colocar las primeras piedras de la campaña 2023-24.
Después de un notable arranque de curso acompañado de importantes expectativas, los Portland Trail Blazers se diluyeron estrepitosamente hasta finalizar la regular season en la 13ª posición de la Conferencia Oeste. Su balance de 33-49 emerge como el sexto peor de la NBA, lo que les acerca a elegir entre las primeras cuatro posiciones del draft de 2023 si les sonríe la suerte de la lotería.
Sin embargo, el contexto de los Blazers es distinto al de las otras franquicias que aspiran a seleccionar en lo más alto del draft, pues priorizarán el poder competir de forma inmediata sobre el desarrollo de los jóvenes. Así, informa el medio The Athletic que los Blazers planean utilizar su pick de primera ronda para reforzar la plantilla con alguna pieza de cierto estatus. Obviamente, siempre y cuando esta selección no sea la número uno, la cual guardarían como oro en paño. De acuerdo con el portal Tankathon, cuentan con un 10,5% de probabilidades de hacerse con dicho pick.
Los Blazers ya disfrutaron de una selección alta en el draft de 2022. Los de Oregon escogieron al tan prometedor como enigmático Shaedon Sharpe, quien, tras un comienzo de temporada bastante discreto, terminó por mostrar todo su potencial en el tramo final. En sus diez últimos partidos promedió 23,7 puntos, 6,1 rebotes y 4,1 asistencias en 35,9 minutos.